Protocolos naturales para el Coranavirus
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16 marzo, 2020Os comparto un audio que hice hace algunos años para mis alumnos de una versión libre de la meditación taoísta de la sonrisa interior, como un recurso para fortalecer el ánimo en estas circunstancias por el poder que una simple sonrisa produce en todo el cuerpo. Las comisuras de los labios y los laterales de los ojos ascienden y con ello permiten elevar el ánimo y la vitalidad. La energía de la Tierra, que es el combustible del Ser Humano, sube.
Recuerda que la sonrisa genera endorfinas (los neurotransmisores conocidos como la «droga natural de la felicidad») a quien la practica y muchas veces a quien la recibe. Estas sustancias químicas fluyen por la sangre cuando estoy relajado y alegre.
Esta meditación beneficia a todos los órganos, pues es un recorrido amable por los órganos principales sonriendo y agradeciendo. Dicen que la glándula timo, que para los taoístas es la sede del amor y de la fuerza vital se ve muy beneficiada y desde la ciencia genera células tipo T que aíslan y destruyen las células «anormales».
La sonrisa con sentimiento de cariño y gratitud abre los órganos, los relaja y estimula las emociones «positivas» que residen en ellos. Es una de las prácticas esenciales del taoísmo.
Una vez que instalo en mí esta cualidad me sirve para intercambiar conocimiento y energía con todo mi organismo: sonrío a cualquier zona donde sienta tensión, sonrío a toda mi columna vertebral, a cualquier parte de mi cuerpo, sonrío a las sensaciones que aparecen y desaparecen. Sonrío para relacionarme mejor conmigo.Y también hacia fuera: sonrío a la Tierra, al Cielo, a la Luna, a las Estrellas, a las plantas, a los animales, a las personas.
Puedes sentarte en el borde de una silla con la columna vertebral alineada.
Pies separados y enraizados. Ingles abiertas. Lumbares en posición neutra. Pecho y barbilla ligeramente hundidos. Parte alta de la cabeza hacia arriba, como si hubiera un hilo que tira de mí hacia el cielo.
Hombros relajados y manos en el abdomen para empezar.
O si prefieres puedes hacerla tumbado.
meditación de la sonrisa interior